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Solo tres personas, de 110, lograron sobrevivir a un accidente aéreo registrado ayer a kilómetro y medio del aeropuerto internacional José Martí, en La Habana (Cuba).
“A nuestro centro de urgencia y emergencia llegaron cuatro lesionados; de esos cuatro, el primero llegó ya muerto, y estamos atendiendo a tres que están en estado muy grave”, declaró Carlos Martínez, director del Hospital Universitario Clínico Quirúrgico General Calixto García, centro al que fueron trasladados los heridos
El Boeing 737-200 de la compañía mexicana Damojh, alquilado por Cubana de Aviación, se estrelló ayer a las 12:08 de la tarde (hora local) mientras despegaba del aeropuerto de La Habana con destino a Holguín, ciudad del oriente de la isla.
El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, se desplazó de inmediato al lugar del siniestro, donde encabezó el grupo de autoridades del Gobierno y el Partido Comunista que se hicieron presentes en el lugar.
“Ha ocurrido un lamentable accidente de aviación. Según el personal de Cubana, tienen 104 pasajeros con seis personas de tripulación. Las noticias no son nada halagüeñas, parece que hay un alto número de víctimas”, confirmó el sucesor de Raúl Castro.
“Durante el despegue aparentemente sufre una falla y se precipita al terreno”, informó la Secretaría de Comunicaciones y Transportes de México, que detalló que en el avión viajaban cinco tripulantes mexicanos y que la nave había sido fabricada en 1979. Autoridades cubanas precisaron que la mayoría de los tripulantes serían de nacionalidad cubana.
Por su parte, Roberto Peña Samper, presidente del Instituto de Aeronáutica Civil de Cuba, indicó que estaban “investigando las causas del accidente” e informarían lo antes posible.
La tragedia pudo haber sido mucho mayor si en lugar de caer en un área de cultivos agrícolas, como ocurrió, se hubiera desplomado en alguna de las muchas viviendas o, incluso, un instituto de educación superior de estos núcleos urbanos, situados a 30 kilómetros del centro de la capital en los municipios de Boyeros y Santiago de las Vegas, ambos colindantes con la terminal aérea.
Hasta la zona del siniestro se desplazaron numerosos vehículos de bomberos, que trabajaron para controlar el incendio y posibilitar que policía y asistencia médica y decenas de voluntarios trabajaran en la búsqueda de supervivientes y en la localización de las cajas negras.
“Primero se oyó un estruendo fuerte y luego se empezó a ver el humo, y al rato estaban pasando los carros de bomberos y las ambulancias. Las calles de por aquí están cerradas y todavía se ve una columna de humo”, relató Odalys González, una residente del municipio Boyeros. En el campo solo las alas del avión se identificaban con claridad. El resto era un amasijo de hierros y árboles calcinados.
Pasajeros que esperaban su vuelo en la terminal 3, donde confluyen la mayoría de los vuelos internacionales, fueron testigos horrorizados del momento y precisaron que la aeronave estalló al tocar tierra. Podían ver no demasiado lejos una gran columna de humo negro.
Nave arrendada
Las últimas semanas se comentó que Cubana de Aviación había suspendido varios vuelos nacionales por el deterioro de sus aeronaves, justamente en aras de garantizar la seguridad de los pasajeros. Pero este último accidente sucedió en una nave arrendada a la aerolínea mexicana Damojh (Global Air), junto con su tripulación, por lo que México también está de luto.
No es la primera vez que Cuba enfrenta una tragedia de estas características; de hecho, desde 1919, ya son 24 los accidentes aéreos registrados en la isla, en los cuales 479 personas han perdido la vida.
El más reciente incidente aéreo ocurrió el 29 abril de 2017, cuando un avión AN-26, de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, colisionó contra la loma La Pimienta, municipio Candelaria, en la provincia de Artemisa, y fallecieron sus ocho tripulantes.
En noviembre de 2010 aconteció otro lamentable desastre, al desplomarse la aeronave ATR 72-212, de la línea aérea Aerocaribbean S. A., que cumplía el vuelo CRN883 en la ruta Santiago de Cuba-La Habana. Murieron todas las personas a bordo: 68, de ellos cuarenta cubanos y 28 ciudadanos extranjeros de una decena de nacionalidades.
Dirigentes de la comunidad internacional expresaron su apoyo al pueblo cubano, entre ellos el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, quien en su cuenta de Twitter escribió que “España traslada al pueblo cubano su solidaridad y afecto por el trágico accidente aéreo que ha causado decenas de fallecidos. Nuestras condolencias a las familias de las víctimas”, dijo Rajoy.
